diumenge, 2 d’abril del 2006

Memorandum

Al servicio la musa Érato. O la musa araña

Me llama mi amiga folclórica. Albricias! está contenta. Ella dice que es porque el consejo gratuito sacado de una página web da resultado, pero luego me cuenta que ha estado flirteando con un compañero de trabajo. Lo llego a saber antes y contrato a alguien, de verdad. Nunca he creído que un clavo saca otro clavo, pero hay a quien le da resultado.

Noche de paz... noche de amor... ay no! que eso es en navidad y todavía no toca. Noche de tranquilidad.

Parada técnica en el Fnac para aprovisionarme de libros.

Nosotras que no somos como las demás - Lucía Etxebarria
Manual de la perfecta cabrona - Elizabeth Hilts
Predator - Patricia Cornwell (la doctora Scarpetta de nuevo en la palestra)

Echando un vistazo me he percatado de que hay un sinfín de libros dedicados a las mujeres y sus desastrosas relaciones de pareja. Todos en clave de humor, por supuesto. El que me ha llamado la atención ha sido "Amores Imperfectos" de Sonia Urbano, donde empieza con Batman, sigue con Robin Hood y acaba... no sé como acaba, porque no me ha dado tiempo a leerme el final. Lo que sí está claro es que todos, absolutamente todos, hacen incapié en que el príncipe azul no existe. Y tienen razón.

Parada técnica en el estanco para aprovisionarme de tabaco.

Parada técnica en Mercadona para aprovisionarme de Southern Confort.

Una de las ventajas de estar sola es que por fin puedo tener todo el alcohol que quiera en casa y no va a venir ningún elemento a dejarme el cubo/bar temblando. Me pregunto qué tipo de imán tendré para acabar siempre con hombres a los que les gustan las bebidas espirituosas más que a un tonto un lapiz. Al final opté por no comprar nada, con lo que ya sabéis, me aficioné al te y a no dormir. Reconozco que esta noche descansaré mucho mejor, porque después del lingotazo de bourbon que tengo ante mí, todo se ve de distinto color, aunque no haya luz.

Ra dice que si me muerdo la lengua me enveneraré. Puede. Debe ser porque no poseo la familia "Encanto". Casi siempre digo lo que pienso de la peor forma posible; puedo descojonarme en un entierro; un día me visto como para ir a la ópera y al siguiente me darían caridad al verme por la calle; inadaptada social salvo en raras ocasiones; me paseo por los cementerios de las ciudades donde voy de viaje, incluso los de la mía... Si añadimos que mis ojos son capaces de escupir vitriolo y que mi "imbécil" es casi tan doloroso como la coz de un equino, puedo decir con total ecuanimidad que mis acciones no se cotizan en bolsa.

Y después de venderme tan bien, solo queda despedirme.

"Idiota" - Nena Daconte