dissabte, 21 d’abril del 2007

1984


Ha sonado el móvil varias veces. Una música distinta depende de quién llame. No lo cojo. Si es urgente volverán a llamar, si no, que esperen.

Me pregunto cómo vivíamos antes de estar tan controlados. Conozco gente que se llevan el móvil y el inalámbrico al lavabo por si acaso les llaman justo en ese momento. Es el colmo de la paranoia.

Estamos inmersos en el mundo de la información. Hemeroteca, descarga de películas que todavía no se han estrenado, vídeos, música, búsqueda de pareja, venta de objetos, subastas, viajes, todo virtual, a un click del botón izquierdo del ratón.

Si por algún motivo te has adherido a una campaña cívica, aparecerá tu nombre en san Google; te han puesto una multa? también; eres moroso? funcionario? más de lo mismo. Incluso puedes pedir estados de cuentas gratuitos de algunas empresas.

Quién no tiene un conocido trabajando en una de las principales operadoras de telefonía móvil? Dales el número y tendrás dirección, cuenta bancaria y otros detalles que te servirán para utilizarlos en contra del bendito que te haya llamado el día que se te crucen los cables.

Identificadores de llamadas en todos los modelos de teléfonos fijos. Localizadores de ip's, programas para crakear contraseñas (muchas veces no hace ni falta, somos muy poco originales), y programas para saber si te tienen admitido o no en el messenger. Eventos con los que puedes saber cúando se conecta y desconecta un contacto, contadores de visitas, links trampa...

Qué decir de las cookies (no, no son galletitas), que proporcionan una vital información sobre nuestros hábitos navegantes (de ahí que tantos reciban spam desde miles de páginas porno).

Mails multitudinarios con avisos de "no agregues a tal o pascual, que es un virus". Serán cazurros! Hoy he recibido uno de esos en los que te avisan que, o reenvias a 18 personas (porqué habrán escogido ese número es algo que se me escapa) ese mail o tendrás que pagar por utilizar el messenger.

Literalmente de la página de msn:



Es gratis Windows Live Messenger? SI, SI, SI!!!

Lo único que pretenden es que les proporcionemos direcciones de correo electrónicas para añadirlas a sus bases de datos!!! Claro, eso no pasaría si utilizaramos mi tan querida copia oculta y borrásemos todas las direcciones que aparecen en los múltiples reenvíos, pero como somos pocos los que hacemos eso... después ala, venga a recibir ofertas publicitarias!!

No menos importantes son los historiales. Cualquier persona que se siente ante nuestro ordenador, si se da un poco de maña, podrá pasar horas entretenida fisgando qué páginas hemos visitado y las conversaciones que mantenemos con zutanito o menganito. Ya no digamos si quien hace eso es el/la partenaire de turno, quizá le demos más de un disgusto y nos cueste caro el divorcio...

Por no hablar de las webcam. Rascarse según qué partes, hurgarse la nariz, poner cara de agobio o hacer burla está completamente prohibido, so pena de que te consideren guarro, estúpido, gilipollas o las tres cosas a la vez.

No somos otra cosa que los ratoncitos de Gran Hermano, por mucho que neguemos la evidencia. Y encima, pagamos.

Orwell era un visionario.